viernes, 17 de junio de 2011

Días que empiezan con un "La pobre es que estaba fatal"

O días de mierda, también se los puede llamar así.

"La pobre es que estaba fatal"

Es lo primero que he escuchado esta mañana, junto con el sonido de un teléfono que suena que no sé si es de verdad o lo estoy escuchando en sueños. Me niego a levantarme, por si acaso, y me obligo a seguir durmiendo.

Lo primero que me veo al levantarme es a mi abuela llorando. "La Carmen..." Asiente.


La verdad es que no sé cómo seguir. Podría contar alguna que otra cosa sobre Carmen. Podría contar que mi abuela se fue al tanatorio, seguro que sin comer nada, y que no tiene pensamiento de volver hasta que todo acabe. Que me regaló dos bolsas enteras llenas de lanas y de hilos porque sabía que yo hago cosas y ella ya no los iba a usar. Que no creía que iba a ser así de inmediato... Podría incluso abrir aquí un debate sobre la vida y la muerte. Pero serviría de algo??

En fin, supongo que no llevo muy bien esto de que la gente se vaya, por llamarlo de alguna forma más o menos bonita.

Días de mierda, señores. Desde el minuto 1.

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